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Vistas de la ciudad de Ourense |
Hemos encontrado curioso un documento de una excursión de
dos días por Ourense organizada por la Real Sociedad Geográfica, de mano de Don Alvaro María de las Casas, el
día 12 de Abril de 1926. La excursión aporta descripciones y pinceladas
históricas de nuestra ciudad y de cómo
era en aquellos tiempos.
“Voy hablaros de mi Orense arrinconado, escondido, ignorado siempre, pero siempre hermoso y
eternamente feliz,... contentóme hoy con describiros mi ciudad, alegre y
confiada haciéndome la ilusión de que cerrados
los ojos del cuerpo y bien abiertos los de la imaginación me acompañais
en un paseo por mis calles...
Llegamos en tren, la estación que surge tras un violento
recodo tiene escrito su nombre en sus cuatro fachadas, varios mozos (el "Grilo", el "Mazarocas", el "Cudeiro")
se encargan de tomar nuestros equipajes y llevarlos al hotel.
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Iglesia del Santo Ángel |
A la izquierda donde se encuentran los pabellones del hospital
nuevo, la tristísima carretera de la Loña con
los cipreses de Velle y la carretera alegre de Maceda con sus chalets y villas, al fondo Montealegre
cubierto de pinos y madroños, a la derecha la montaña de Ervedelo y el
solitario convento franciscano de Vistahermosa, con su parte vieja, amplia y
señorial, y su capilla nueva, debida a los caudales de Don Fernando Pérez Bobo. Un poco más cerca
se divisa el castillado asilo de Santo Ángel fundado por la condesa
del Valle de Oselle un año antes (3 de junio de 1925) donde el Asorey dejó realizado un sepulcro de Don Isidoro de Temes y Saenz, un altar de Jorreto
Madrona,un sepulcro de gabino Amaya y un angel de la guarda de Piñeiro y más lejos la cumbre de santa Ladaiña (inmediata a Piñor).
Observando Orense se
deduce que debe ser extraordinariamente calurosa en verano y frío, húmeda en
invierno, con abundancia de aguas, dispone de huertas muy fértiles.
En las estadísticas figura con 16.000 habitantes pero
posiblemente llegue a los 20.000, es una capital de tercera clase residencia de
un obispo, un coronel y gobernador civil.
Ourense en 1886 contaba
con 10775 habitantes y 905 casas.
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Vistas del Puente Viejo desde el paseo fluvial, Ourense. |
Entraremos por el Puente Viejo que hoy día permite una
entrada más bella en la ciudad parece ser que lo mando construir trajano pero
de tantas transformaciones de romano solo conserva el nombre, siendo la más
importante la llevada por el Obispo Lorenzo en tiempo de Fernado el Santo, también las del Obispo Silva y la
que terminó el maestro Melchor de Velasco, mide 369, 80 metros de longitud y de
5 metros de anchura, y consta de siete arcos, el mayor de todos tiene de luz de
43,68 metros. Dícese de una de las pilastras de este puente esta hueca y en
ella se amontona los esqueletos de algunos olvidados y conspiradores del siglo
pasado que allí se ocultaron y no pudieron salir.
En la parte izquierda del río a la derecha del puente se levanto en una
piedra blanca un monumento a Curros Enríquez con la descripción “Exvoto que los admiradores de Curros dedican a las
ondinas del Miño para que velen por su inmortalidad".
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Capilla de la Virgen de los Remedios |
Pasando el puente nos
encontramos la capilla de la Virgen de
los Remedios en cuya fachada principal nos encontramos los escudos de los
Mendez Montoto, esta ermita la fundo Francisco Méndez a su costa el año 1522 y
la re-edificó su hijo Alonso Méndez De Montoto en el año 1584.
Siguiendo la carretera vemos a la izquierda el colegio
salesiano (antigua fábrica de curtidos de don Francisco Pérez Bobo sobre la
cual hubo un gran pleito). Y también a la Alameda del Crucero llena de acacias, que era el lugar donde se ajusticiaba
hasta mediados del siglo pasado.
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Edificio Espada (el que hace esquina)
que fue sede del Gobierno Civil |
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En la Calle del Progreso
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Continúa la calle del Progreso, antiguo Camino Nuevo donde podemos ver la casa numero 52 donde se fundó el diario El Miño, y la número 79, donde desapareció el Círculo Liberal; la del 40, donde se hospedaba Paco Roque cuando venía de Celanova; y el 44 con la fonda del Coanda que era la más antigua que se recuerda en Ourense, vemos la casa blasonada de los Espada hoy Gobierno Civil, y casi a lado el Palacio Provincial viejo caserón construido por Pérez Bobo donde hoy alberga la delegación de hacienda y la diputación (que alberga grandes tesoros entre ellos la pompeyana de Parada Justel).
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Quiosco de música en
la Alameda |
Pasean por la calle de Reza que era el antiguo camino que
conducía a dicha feligresía, siguen por
la calle del progreso (comienzo de la carretera de Verín, vemos a la izquierda
el Seminario Conciliar de San Fernando construido por el Obispo Cesáreo
Rodriguez cuya biblioteca merece la pena ser visitada, a la derecha el
desaparecido Hospital de San Roque, fundación del Obispo francisco Blanco
(1556-1565) cuya portada renancentista es lo que más destacaba. Inmediato los jardinillos y la estatua de concepción
Arenal y enfrente la Alameda donde distraen las tardes veraniegas el noventa
por ciento de los habitantes de Ourense, desde el cual se ve la cumbre del
Castelo donde se erguía el temible castillo de la Mitra, asaltado por la
revuelta de los Irmandiños en el que fue degollado Ruy Díaz Cadórniga, cerca
del solar del castillo se conserva la bella casona de los salgados.
La calle Pereira, antigua huerta del concejo, cuya casa
número 4 merece la pena la atención. Entramos en la Plaza Mayor, también llamada de la Constitución, y antiguamente
del Campo, en cuyo frente se levanta se
levanta la Casa Consistorial (donde se conservan la ejecutoria de los Méndez y
de alguna nobleza de la ciudad), abundan los soportales en una plaza
ligeramente inclinada por donde se suele pasear las tardes de invierno, y el
espolón por donde pasean los enamorados y los comentaristas políticos después
de cada sesión en el concejo.
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Vista de la escalinata delante
del Palacio Episcopal |
La casa numero 21 de la plaza mayor vivió una renombrada
familia judía, la que tiene el 20 está sobre el solar del antiguo palacio de
Torremuzquiz y en ella estuvo la famosa botica de Seara, en el 8 estaba el
circulo conservador.
A la derecha del Ayuntamiento está el Palacio Episcopal por
los restos de su elegantísimo claustro románico, construido a fines del siglo
XIII, en la época de obispo Pedro Yañez de Noboa, limitando una de sus fachadas
con Santa María Madre, donde hay una imagen de la dolorosa talla del siglo
XVII, sus columnas de mármol son una verdadera joya arqueológica.
Saliendo por la puerta lateral vamos a la plaza de la Verdura, que tiene mercado
todas las mañanas, a espaldas del caserón de los Gayoso, era el antiguo
cementerio ciudadano, diríase que la plaza no perdió sus tristeza desde
aquellos tiempos.
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Calle del Cardenal Cisneros |
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Calle del Olvido |
Por la empinada calle del Olvido salimos a la calle de
Cisneros frente la casa donde vivió don Antonio Saco Arce y torciendo por la derecha en tramos por la
calle Hernán Cortés con varias casas blasonadas, una de ellas a casa de los
conde de Troncoso, vemos la típica plaza de los Cueros y la casa donde murió
el poeta García Mosquera, traductor gallego del Beatus Ille Horaciano, y
desembocamos en la plaza de san Cosme, que era el centro de Orense hace
cincuenta años, camino arriba vamos a monasterio de San Francisco, el claustro
está ruinoso y las bóvedas medio derruidas, en este templo se conservan los
interesantes sepulcros de Juan de Novoa y su madre doña Elvira de Don Gonzalo
de Puga y Teresa de Novoa y del temible don Pedro Diaz de Cardóniga, bajan por
la calle “Quebracus” y pasan por la plaza del Corregidor donde visitan la casa
del mismo nombre y el palacio de los Temes.
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Salida de la Catedral a la Plaza del Trigo |
Siendo la hora de cenar, bajan por la calle de las Flores,
mirando la torre del reloj de la catedral, a la plaza de Trigo, viendo la así
la puerta sur de la catedral. Y vuelven a la plaza Mayor, donde se encuentra
el liceo recreativo de Ourense, instalado en el palacio de 1520, de don Alvaro de Oca y Deza casado con doña María Sarmiento, fundador del vinculo del Celme, e hijo del temible don Suero de Oca y el
amigo inmortal conde de Camiña, este local sirvió como residencia de la compañía
de Jesús y fue propiedad de doña Joaquina de Montenegro Marquesa de Valladares,
que ganó pleito al Marqués de Leis.
Cebaron una rica empanada de anguilas, sardinas con
cachelos, lacón con grelos, deliciosas frutas de Mariñamansa, y queso de
Monterroso, un cafecito y unas copitas de aguardiente del país.
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Calle de la Corona |
Pasean por a calle de la Barrera y entran por la de Cervantes, animada por muchos bebedores y jolgorio, en un sinfín de tabernas,
continúa por la calle Villar, calzada de
mal vivir, llegamos a la plaza de la Trinidad, (allí escuchamos a un músico trabajador, bordando rápidamente unas escalas).
Plaza de la Leña, en un lugar donde hace 90 años se
representaba obras de teatro, la calle de la Libertad, calle de la Corona,
antigua prisión de clérigos (por eso puede recibir el nombre por el circulo que
ostentaban en la cabeza los antiguos
frailes), luego Aula de Humanidades y vivienda de criados episcopales.
Al día siguiente acuden a visitar el polvorín (donde años atrás hubo sido ajusticiado un desdichado), donde se recitan obras poéticas y
ven acudir a las mozas de la Balenzana, barbadanes. Piñor con sus cestos
de legumbres y frutas, al mercado de la
ciudad.
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Cimborrio de la Catedral |
La catedral destaca el cimborrio de buen gótico, la puerta
sur que da a la plaza del Trigo, del románico, y la toree del reloj, del siglo
XVIII, por la calle de las tiendas, veremos el pórtico, tal vez antigua entrada principal hoy inutilizada , por la
calle Juan de Austria, veremos el célebre patin, ventana ojival del a capilla
de san juan construida después del
asalto que la iglesia sufrió por parte del conde de Benavente. La fábrica es
románico de transición, con elementos del gótico, (Torre de las Campanas) que
recubre a la antigua, en el interior destaca, el retablo de la Quinta de la Angustia, de la escuela de San Juan de Juni, antigua capilla del Cristo en la
que hay un precioso conjunto del gótico, churrigueresco, sobre la que se
escribió literatura, y creo que es una momia análoga como la de Burgos, frente
la entrada de esta capillita, nos encontramos la sepultura de Don Vasco Pérez
Mariño (1333-1343), el Obispo que según la tradición trajo al cristo de Finisterre de donde era señor, y en cuyas aguas aprecio la imagen de la santa,
en frente se encuentra el altar del Carmen con una buena pintura de cobre, la
capilla de San Juan de elegante gótico, y numerosos sepulcros obispales, la
sala capitular, obra del siglo XIV hecha
para servir de
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Frontal de la Catedral |
claustro pero quedo inacabada, (allí se conservan algunos tesoros como misal de monterrey, de
los mejore incunables de España, cruz llamada de oro y dos esmaltes del siglo XVIII, se verá por el deambulatorio pinturas de Parada
Justel y el Cristo bizantino de los Desamparados, en la capilla mayor la
rejería de Juan Baustista Celme, la tumba del obispo Quevedo, la tumba del
obispo Alfonso en 1213 considerado el sepulcro más curioso de España, el
tabernáculo de Pecul y dos grandes cuadros de Piti, el coro hecho en la
escuela de Berruguete, también encontramos la Dolorosa del Cristo, con la leyenda en la cual un seminarista, a quien el diablo debió llevar por malos caminos, tras una aventura que había tenido en la sinagoga de la huerta del concejo, recobró la fe ante su altar, llega la hora de la comida y un monaguillo avisa sonando su manojo de llaves.
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Vista de la Catedral y Santa Eufemia, en el casco viejo de Ourense |
La visita continúa con la iglesia parroquial de Santa
Eufemia, construida en el siglo XVIII, en cuya
fachada nos encontramos los blasones de los Montenegro, (siendo tierras
también de los Moscoso, Ulloas, Altamiranos, Valcarcel, Díaz de Cardóniga, Limias y cientos más).
Después por la Plaza del Recreo, en cuya casa numero 5
estuvo el Casino, y la calle de la Paz y plaza del Hierro, donde hay una docena
de casas típicas gallegas, el palacio de los Bolaño, teatro de "Renombraos", cuyos saraos
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Casa blasonada en la calle Santo Domingo,
cuyos bajos albergaron un teatro |
nuestros abuelos recuerdan y la
fuente que viene del Monasterio Benedectino de Osera, la calle de Santo Domingo, en la cual hay buenas labras de heráldica, y memoria de otras como la
del conde de Taboada, (cuya reproducción he visto en una curiosa guía, publicada
sin fecha ni indicación alguna en el pasado siglo), también se conserva la casa
de los Reinoso (que fue uno de los primeros teatro de Orense), de cuya última
señora se cuentan anédoctas curiosísimas, el convento de Santo Domingo fundado
por Domingo de Araujo donde hay blasonados enterramientos, y el patio del
convento sepulcros del siglo XII y siglo XIII.
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Patos en la fuente de la Plaza de las Mercedes |
Plaza de las Mercedes, que tiene aires de jardín de las Clarisas, para ver construido el hospital, en los años de la invasión
francesa, acabando la visita en el campo
de San Lázaro, propiedad del concejo.
Cita además calle de
san Miguel con aspecto triste y negro de las muchas carbonerías y la calle de San Fernando, donde vivían los canónigos de la catedral cuyas casas sirvieron
después para las pasantías de humanidades, y las posadas de teólogos de
primeros cursos.
El nombre de Orense lo derivan los eruditos de de Auria, el
padre Flórez lo acepta así, pero Bullet deriva el nombre de "or" (agua) y "ennes" o "ens" (caliente) pero dice Flórez que esta etimología es moderna y que no aplica.
Recorre (históricamente) don Fernando
III en 1232, el Duque de Lancaster, en 1386, Felipe el Hermoso por espacio de
tres semanas.
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Capillita de la Virgen del Carmen,
en Las Burgas |
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Instituto Otero Pedrayo
(Instituto de Enseñanza mencionado) |
Las Burgas, las de Arriba, Abajo y las del Surtidero, las
dos primeras lanzan 125 litros de agua por minuto, a una temperatura de 66
grados. Los jardines del Posío donde está la estatua de Valentín Lamas
Carvajal, con su fuente traída del Convento de Osera, el Instituto de Enseñanza, con una riquísima biblioteca
y buenos incunables, aquí está la sede
de la comisión provincial de Monumentos, y un gabinete de historia
natural.
Pasear por la calle de Fuente del Rey donde abrevan los
caballos de la diligencia a Bande y
Verin.
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Antiguo edificio en la actual Calle del Progreso.
En la calle anexa paraban las diligencias. |
Cuando volváis encontraréis una ciudad moderna, un nuevo
mercado, canalizado el Barbaaña, dos bibliotecas, jardines de Santa María Madre,
reedificado el convento de Santo Domingo, descubierto un monumento a Curros,
las bóvedas de San Francisco reunirá las cenizas de todos los orensanos,
desperdigados por todos los sitios, tendrá tranvías eléctricos, funicular, tres generales
y un arzobispo y hasta una agencia de turismo".
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